Mente y corazón

Al iniciar una clase de arnis filipino (kali eskrima), siempre al saludar para mostrar respeto al sensei y al hacer la reverencia colocamos nuestras varas a la altura del corazón y de la frente, para hacer notar que entrenábamos con el corazón y la mente.

Con el corazón porque el empeño que empleábamos al entrenar tiene que venir de adentro de un mismo para nunca rendirse; y con la mente para realizar un combate inteligente.

Lo que me atrae de las artes marciales es la capacidad que te proporciona para usar tu cuerpo y mente de formas que no podrías imaginar que podrías hacer, pero esto solo lo logras con tu esfuerzo, constancia y conocimiento.

Cuanto más conocimiento y habilidades adquieres, mayores responsabilidades tienes de no usar dichas habilidades de maneras innecesarias, y es cuando tienes que hacer uso de tu mente para librar los combates diarios de manera inteligente.

El común denominador creería que quienes entrenan artes marciales son personas que en cualquier momento pueden explotar y golpear a todos de manera irracional, pero esto es incorrecto, un verdadero guerrero toma como filosofía de vida la tolerancia, pues siempre habrá una manera de librar una batalla sin pelear obteniendo un resultado positivo para ambas partes, ya que la practica de artes marciales crea personas conscientes a todo lo que lo rodea.

Ser un guerrero es una labor de todos los días, seguramente más de una vez fallamos pero si podemos identificar esto y podemos retomar el camino, eso es lo que nos convierte en verdaderos guerreros, todos podemos caer pero esta en nosotros levantarnos y volver al camino.

Recuerda siempre usar tu corazón y tu mente en todo.

Para cerrar la presente les dejo una frase de la película de "Batman Begins" que dice: "...NO IMPORTA QUIEN SEAS EN TU INTERIOR, TUS ACTOS SON LOS QUE TE DEFINEN...".